TeMaReflexiones
Teodoro Marín
VENGA TU REINO
El
Reino fue el mensaje con el que empieza la predicación de Juan el Bautista y de
Jesús: “Arrepentíos porque el reino de
los cielos se ha acercado” (RVA), “Vuélvanse
a Dios, porque muy pronto su Reino se establecerá aquí” (TLA) (Mateo 3:2;
4:17).
Jesús
enseña a sus discípulos a orar: Padre nuestro “Venga tu Reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en
la tierra”. Mateo 6:10
1. VENGA EL REINO
El
Reino viene de otra parte - del cielo
El
Reino se debe pedir (si no se pide no viene, no viene al azar, no es arbitrario,
no se impone por cuenta propia, se establece el reino cuando se pide)
Pedirlo
al padre nuestro (al Padre de todos los creyentes) que está en los cielos. Él
lo trae en Jesucristo.
2. TU REINO:
El Reino de Dios, no otro
No el propio de cada persona - el yo
No el de otra persona que domina a los demás
No
un sistema de gobierno humano: Democrático, imperialista, socialista, comunista.
No
el reino de las tinieblas – De Satanás o los demonios
3. SIGNIFICADO
DEL CONCEPTO DE REINO
Según el diccionario, reino es un estado o
territorio gobernado por un rey. El Estado
es un concepto político que se refiere a una forma de organización
social y política soberana, formada por un conjunto de instituciones
involuntarias, que tiene el poder de
regular la vida nacional en un territorio determinado.
El Estado
es aquel conjunto de organizaciones que en su totalidad poseen la facultad de
establecer las normas que guiarán una determinada sociedad, ejerciendo su poder
en un territorio previamente establecido. Para que un Estado se constituya como
tal, es necesario que cuente con ciertos elementos básicos: El pueblo, la
constitución política y un territorio.
Otros
atributos importantes desde siempre son un ejército permanente y un cuerpo de
representación diplomática, esto es, una política exterior.
4. TRES REINOS DOMINANTES
El
de las tinieblas, el reino humano, el Reino de Dios,
REINO
DE LAS TINIEBLAS
Es también llamado el reino de Satanás, hace referencia
al gobierno de Satanás y sus demonios (ángeles caídos). Satanás es llamado el
príncipe de este mundo (Juan 12.31), el príncipe de la potestad del aire, el
espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia (Efesios 2:2). Su
cultura es de robo, muerte y destrucción (Juan 10:10).
El apóstol Pablo en la carta
a los Efesios les habla de la “lucha” – la confrontación – contra una
estructura de poderes espirituales organizada jerárquicamente y con ubicación
estratégica: “Vestíos de toda la armadura
de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del Diablo, porque
no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades,
contra los gobernadores de las
tinieblas de este mundo, contra huestes
espirituales de maldad en las regiones celestes” (Efesios 6:11, 12).
El
doctor Murphy dice que Pablo les habla de tres asuntos: uno, necesitan estar
firmes contra las asechanzas del Diablo; dos, no se enfrentan a enemigos
humanos y tres, luchan contra una jerarquía o ejército complejo de seres
sobrenaturales perversos que han infiltrado por completo los cielos y ejercen
gran control sobre la tierra.
LOS
REINOS HUMANOS
Es el gobierno del hombre
con sus propios razonamientos y sus propios sentimientos. Este se manifiesta en
el gobierno de cada país o cada región (departamento o ciudad), expresado a
través de su cultura.
El
reino humano, está influenciado - gobernado por uno de los dos reinos (el de
las tinieblas o el de Dios), pues ambos quieren tener la dirección; depende del
ser humano a quien le sede los derechos.
Las personas son parte del
Reino de Dios o del reino de las tinieblas. Jesús dijo “el que no está de mi parte, está contra mí” (Lucas 11:23). No se
puede ser neutral, está de un lado o del otro, es una víctima o un vencedor.
El concepto de muchas
personas es que los cristianos, reflejan características culturales de estar
influenciados por el reino de Dios pero también por el reino de las tinieblas.
Es necesario un
arrepentimiento - un cambio de mentalidad para que haya un cambio de vida; es
necesaria una reparación, una renovación, una trasformación de nuestros pueblos
según la cultura del Reino de Dios.
REINO
DE DIOS
Es también llamado el Reino de los cielos (Mateo 5:3), el
apóstol Pablo lo llama el Reino de su amado Hijo, que está en oposición al
reino de las tinieblas (Colosenses 1:13). Cristo nos trasladó del reino de las
tinieblas al Reino de Dios.
Para
definir el Reino de Dios podemos
tomar los términos de la definición de reino, dada anteriormente: El reino de
Dios es el gobierno de Dios en un estado o territorio donde él es el rey. Los
elementos del Reino de Dios son: Primero, un
pueblo, los creyentes en él, sus seguidores que han aceptado a Cristo como
Señor y Salvador y la Iglesia, que es el
conjunto de creyentes congregados en su nombre; estos también son llamados los
ciudadanos del reino. Segundo, la constitución de gobierno del Reino de Dios:
las Sagradas Escrituras donde están todas sus leyes y tercero, el territorio, que es donde el Señor
reina: La vida de los creyentes (Efesios
4:3,17), la iglesia (1 Corintios
12:3, 5, 11) y todo lugar donde se establezca su reino (Mateo 6:10). Los otros elementos son un ejército permanente de ángeles y soldados de batalla y un cuerpo
de diplomáticos en su política
exterior del cielo en la tierra, llamados los embajadores en nombre de Cristo.
Este
gobierno de Dios se extiende a la tierra, se ejecuta su plan de gobierno en la
tierra como se hace en el cielo, como Juan el bautista y Jesús lo anunciaron: “El Reino de los cielos se ha acercado”
y como Jesús enseño a sus discípulos a orar: “Venga tu Reino”. El Reino de los Cielos, trajo una sede a la
tierra y el Rey vino para gobernar en el
mundo espiritual, sobrenatural, para que su efecto sea visto en lo natural en
medio de su pueblo.
El Reino de Dios hace referencia al gobierno de Dios, al señorío de Cristo y la guía del Espíritu Santo en la vida de las personas que aceptan a Cristo como el Señor y Salvador. El Reino de Dios establece su propia cultura para los hijos del Rey Jesús.Reino de Dios, es un nuevo estado de cosas en que rige la salvación y la voluntad de Dios; fue anunciado por los profetas de Israel, predicado e instaurado por Jesucristo. Su realización, incompleta y temporal en la iglesia militante, se consuma y perpetúa en la iglesia triunfante. De los cielos. Cielo (morada en que se goza de la presencia de Dios como Rey)[1].
El Reino de Dios hace referencia al gobierno de Dios, al señorío de Cristo y la guía del Espíritu Santo en la vida de las personas que aceptan a Cristo como el Señor y Salvador. El Reino de Dios establece su propia cultura para los hijos del Rey Jesús.Reino de Dios, es un nuevo estado de cosas en que rige la salvación y la voluntad de Dios; fue anunciado por los profetas de Israel, predicado e instaurado por Jesucristo. Su realización, incompleta y temporal en la iglesia militante, se consuma y perpetúa en la iglesia triunfante. De los cielos. Cielo (morada en que se goza de la presencia de Dios como Rey)[1].
El
hecho de que alguien pertenezca al Reino de Dios no se evidencia en la
observancia minuciosa de ordenanzas, que son externas y materiales, sino en
cosas más profundas del corazón, que son espirituales y esenciales, “porque el Reino de Dios no es comida ni
bebida, sino justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo” (Romanos 14.17)[2].
Los creyentes en Cristo viven físicamente en su
respectivo país, pero no conforme a la totalidad de su cultura, porque están en
el mundo pero no son del mundo, pues viven sentados en lugares celestiales, son
ciudadanos del Reino de los cielos, aquí en la tierra están como embajadores de
Dios, por lo tanto su cultura superior
es la del Reino de los cielos.
El
Reino de Dios se debe anunciar. El mensaje de Juan y Jesús fue: Arrepentíos,
porque el Reino de los cielos se ha acercado. Mateo 3:2; 4:17
El
Reino de Dios es de mucho valor, superior a todos los demás reinos con una
ideología mucho más excelente. Es pequeño como un grano de mostaza pero que al
sembrarlo se hace grande, es como un tesoro escondido que al encontrarlo causa
gran alegría, como una perla preciosa encontrada. Es como una red que recoge
muchos peces (Mateo 13)
5.
SEA HECHA LA VOLUNTAD DEL REY
Como se hace la voluntad de
Dios en el cielo, así se haga en la tierra
·
Justicia = rectitud y verdad para todos
·
Paz fundamentada en el amor
Vivir en la tierra según la
cultura del Reino de los cielos. Tener un lenguaje de reino celestial. Aplicar
los principios del Reino de Dios. Gobernar con su gracia y autoridad.
6.
PRINCIPIOS DEL
REINO DE DIOS
Brevemente se
plantean los principales principios del Reino de Dios, la base, el fundamento o
axiomas sobre el cual se desarrolla el gobierno de Dios planteados en las
Sagradas Escrituras:
- Jesucristo
es el Rey, El es el Señor, el gobernador, el presidente del Reino de Dios
-
Se da una relación personal con Dios a través
de la adoración y la oración en dependencia absoluta de El
-
La plataforma política del Reino de Dios está
planteada en las Sagradas Escrituras aplicada a la realidad del país
-
Se ejerce el poder político de Dios
-
La posición del cristiano es de ciudadano del
cielo y en la tierra está en calidad de embajador.
-
Pretende una restauración integral del ser
humano: Espíritu, alma y cuerpo
-
La justicia social plena
-
El servicio a los necesitados
-
El dar como principio para prosperar
-
El cuidado de toda la creación la fauna y la
flora
-
En el Reino de Dios los que tienen espíritu
de pobres de ellos es el reino de los cielos, los que lloran recibirán
consolación, los mansos recibirán la tierra por heredad, los que tienen hambre
y sed de justicia serán saciados, los misericordiosos alcanzaran misericordia,
los de limpio corazón verán a Dios, los pacificadores serán llamados hijos de
Dios, los que padecen persecución por causa de la justicia de ellos es el reino
y cuando por causa de Jesús los insultan y dicen mentiras acusándolos serán defendidos.
-
El Reino de Dios propende por la restauración
completa del ser humano con buenas noticias para los pobres, vendar a los
quebrantados de corazón, apertura de la cárcel para los prisioneros, sanidad
emocional en lugar de los traumas, El amor en lugar del odio, El gozo en lugar
de la tristeza, La paz interior en lugar de la angustia, La templanza en lugar
de la ira, La felicidad en lugar de la amargura, El descanso en lugar del
estrés, La valentía en lugar del miedo, El ánimo en lugar de la depresión, El
consuelo en lugar del luto, La libertad en lugar de la atadura y la cautividad,
La aceptación en lugar del rechazo, La paternidad en lugar de la orfandad, La
bendición en lugar de las maldiciones heredadas (miseria, la escasez), El
placer sexual en lugar del abuso sexual, La honra en lugar del desprecio, el
deshonor, la deshonra, El perdón en lugar de la venganza y la culpa
-
La unidad en lugar de la división
- Reedificar las
ruinas antiguas, levantar lo que antes fue asolado y restaurar las ciudades arruinadas y los escombros
de muchas generaciones en todo el sentido de la palabra.
A
los gobernantes de cada país se les dice: “Buscad
primeramente el Reino de Dios y su justicia…” (Mateo 6:33)
[1] Microsoft® Encarta® 2009. ©
1993-2008 Microsoft Corporation
[2] W.E.
Vine. Diccionario Expositivo. Editorial Caribe. Colombia. 1984.
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